En el año 2019, la empresa Johnson Controls, líder mundial en tecnología y soluciones de eficiencia energética, inició un proceso de transformación cultural para fomentar el bienestar de sus colaboradores y mejorar el clima laboral en sus instalaciones en Santiago de Chile. La estrategia se centró en la implementación de prácticas innovadoras y en la promoción de un entorno colaborativo, flexible y diverso, en el que los empleados se sintieran valorados y motivados.
Una de las principales acciones llevadas a cabo por la empresa fue la creación de un comité de bienestar, integrado por trabajadores de diferentes áreas y niveles jerárquicos, encargado de proponer y liderar iniciativas que promovieran el bienestar y la salud de los empleados. Gracias a este comité, se establecieron una serie de actividades y programas, como clases de yoga y meditación, talleres de nutrición y actividades deportivas, que se ofrecían de forma gratuita a los trabajadores.
Además, Johnson Controls también implementó políticas de flexibilidad horaria y teletrabajo, permitiendo a los empleados adaptar su jornada laboral a sus necesidades personales y familiares. Esto ayudó a reducir el estrés y la fatiga laboral, mejorando la calidad de vida de los trabajadores y su rendimiento en el trabajo.
Otra de las iniciativas destacadas de la empresa fue la implementación de un programa de capacitación y desarrollo para sus colaboradores, que les permitió adquirir nuevas habilidades y conocimientos, y mejorar sus oportunidades de crecimiento profesional dentro de la empresa.
Como resultado de estas iniciativas, la empresa logró mejorar significativamente el clima laboral, reducir los niveles de estrés y absentismo, y aumentar la productividad y el compromiso de sus empleados. Además, Johnson Controls fue reconocida como una de las mejores empresas para trabajar en Chile en el año 2020, gracias a su compromiso con el bienestar de sus colaboradores y la implementación de prácticas innovadoras.
Finalmente, el caso de Johnson Controls en Chile demuestra la importancia de implementar prácticas innovadoras y centradas en el bienestar de los empleados, no solo para mejorar el clima laboral y la productividad, sino también para atraer y retener talentos en un mercado laboral cada vez más competitivo.
